domingo, 14 de noviembre de 2010

Maniquí de madera articulado


Una de las obras que guardo de cuando cursé Bachillerato y que pese a su simplicidad aún considero todo un encanto por su técnica (puesto que no la había utilizado anteriormente y me maravillé al descubrirla) es este dibujo realizado a tinta china, aplicada con palillo de dientes sobre una hoja de bloc de esbozo DinA-4. Así de sencillo, si alguien está dispuesto le puede sacar partido a todo, incluso a un vulgar palillo de dientes, y es que a veces no hace falta gastarse un pastizal en herramientas de trabajo; con este ejercicio de clase aprendí que si se agudiza el ingenio le puede dar una utilidad distinta a los objetos cotidianos y de valor insignificante.
Tomé como modelo un muñeco de madera articulado de clase, el típico que todo artista tiene a mano para realizar dibujos analíticos y puede manejar a su antojo ya que el maniquí adopta distintas posturas corporales.

¡Un saludo y que disfrutéis del descubrimiento tanto como yo lo hice en su día!

8 comentarios:

  1. Sí, madame, pero ademas de ingenio es preciso tener arte y talento. No vea lo que podría hacer yo con el tal palillo en la mano: el desastre completo!

    Feliz tarde

    Bisous

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  2. yo siempre he pensado que un buen artista en todo el esplendor de la palabra, se demuestra cuando consigue sacar algo grande partiendo de muy poco, tu dibujo muestra eso precisamente y lo asocio totalmente con la vida misma, que de un lapiz/boli/pluma y una hora se puede hacen cosas increibles.

    Un saludón!

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  3. Dame Masquée, muchas gracias por el comentario; yo creo que con talento se nace y por muy torpes que nos consideremos todos tenemos algún talento, el secreto consiste en descubrirlo y fomentarlo. Lo mismo con un palillo no se os ocurre nada ingenioso, pero con otros utensilios sí, nunca se sabe, es cuestión de insistir e ir probando.
    Besos.

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  4. Zephyr, me alegra que te guste mi modesto dibujo, pero aún más que hayas sacado esas conclusiones a partir de él.
    A mí siempre me ha gustado creer que cualquier cosa que tengamos a nuestro alcance se puede transformar en una herramienta o material útil de trabajo, a veces es como escribir, hay personas que se levantan día tras día pensando sobre qué podrían escribir y no se dan cuenta que el mundo cotidiano que les rodea está lleno de cosas sencillas sobre las que podrían escribir, pero transmitiendo ese contenido de una manera original para que no resulte trivial; con el arte plástico pasa lo mismo, el mensaje a veces no importa tanto como la manera de transmitirlo.
    ¡Un abrazo!

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  5. Esto con la srta. Mosquée, sería incapaz de hacer algo bonito, ni con un palillo ni con los mejores materiales del artista. Comparto tu idea de que todos tenemos algún don, pero no todos somos capaces de desarrollarlo, de potenciarlo.
    En tu caso, en cada trazo se muestra tu pasión por lo que haces.

    Este maniquí me ha recordado unos autómatas que incluía en sus cuadros uno de mis pintores favoritos (proximamente en mis entradas).

    Muy bonita esa idea de hacer cosas geniales con útiles y/o soportes sencillos. Lo importante es la idea, el corazón y la técnica.

    Un beso.

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  6. ¡No puedo estar más de acuerdo con los comentarios anteriores!

    A ese palillo le libraste de sucumbir al triste y cruel destino por el cual fue creado, piénsalo! (xD)
    El juego con técnicas "inusuales" me parece super divertido y muy didáctico, quien nos iba a decir que un simple palillo creara arte.
    Un saludo.

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  7. Muchas gracias por tu comentario, Daviblio, me alegro que te guste.
    Quizá las artes plásticas no sean tu campo ni el de Dame Masquée, pero hay un montón de profesiones en el mundo para poder desarrollar las dotes que cada uno lleva dentro, todo es cuestión de probar en distintos ámbitos. Yo, por ejemplo, desde el instituto me di cuenta que ni la física ni la química eran lo mío, ponía mis cinco sentidos en clase y no comprendía nada (pero nada, en serio), al final aprobaba los exámenes porque me aprendía las fórmulas de memoria (bendita capacidad para memorizar), pero no porque lo entendiera.

    A ver si pones prontito tu próxima entrada, que ahora me has dejado con la intriga y no paro de pensar en quién puede ser ese pintor...

    Siento contestar a estas horas, pero estaba acabando una ilustración que ya colgaré en el blog en cuanto elabore una crítica decente del tema; cuando una tiene ganas de pintar no hay que desaprovechar la oportunidad, ya sean las dos del mediodía o las dos de la madrugada, tal y como viene la inspiración también se va...
    ¡Un besote!

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  8. ¡Buenas, Bea! Me alegro de verte por estos lares...
    Ya ves, rescato palillos y todo lo que haga falta para darles una vida mejor... jejeje... De pequeña era la típica que le hacía a sus muñecas unas camas con cajas de zapatos (pintadas y todo) y también construía molinos de viento con cerillas. El año pasado, a mi amiga Nur, por su cumpleaños, le regalé una mariposa hecha con hojas de árbol y un tronquito, a ver si le comento que le haga una foto y me la cede para colgarla...
    Un besazo, wapa.

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